No ha sido fácil, ni lo pretendíamos. No obstante, nos vamos con la conciencia satisfecha por el trabajo hecho. En otras circunstancias políticas más favorables, el resultado habría sido muy distinto. Hemos trabajado hasta el final manteniendo y defendiendo un programa participativo, el único creado de esta forma.
Queremos pensar que hemos frenado algunos procesos destructivos a través de la presión mediática, en las calles y en la institución en asuntos tales como las macrogranjas, el arbolado y la seguridad vial, entre otros.
Estos cuatro años han servido para demostrar que sin diálogo no hay consenso y sin consenso no hay avance para Palencia. Nadie ha querido escuchar a nadie desde el minuto uno. Exceptuando algunos momentos de la pandemia, el tono ha sido muy bronco, había mucha crispación que se ha ido relajando.
No podemos olvidarnos de todas las compañeras que lo han hecho posible. Ha sido una promesa común cumplida y agradecemos el acompañamiento, los consejos y el apoyo, en especial, de las personas que han formado parte de la Coordinadora desde 2019.
Esperamos que alguien recoja el testigo de esta forma de trabajar abierta, horizontal y participativa, a pesar de todas las dificultades, merece la pena porque el espíritu de Ganemos Palencia sigue vivo…