El pasado pleno del mes de Febrero, Ganemos presentó dos mociones en el Pleno del Ayuntamiento de Palencia. Una para reglamentar el despliegue de antenas de telefonía móvil y otra para que Palencia se adhiriera a la Red de ciudades libre del tráfico de mujeres niñas y niños destinados a la prostitución. Ninguna de las dos fue aprobada.
Ante ello, una se pregunta: ¿Para qué sirve la actividad política? ¿Se reduce a una batalla de partidos contra partidos? ¿De egos contra egos? ¿Dónde está la idea de que los concejales del Ayuntamiento son meros representantes de las personas que los han elegido y que están ahí para mejorar , dignificar las condiciones de vida de las mismas?
Estas dos mociones es lo que perseguían, proteger su integridad, su salud, su dignidad, su bienestar. Las dos fueron votadas en contra; la primera por el PSOE y PP, lo que hizo que no hubiera mayoría, y la segunda por el PP y C’s que causo el mismo resultado. Los argumentos que se escucharon después del Pleno, en los pasillos, fueron: “es que no me gustó la actitud que se tuvo presentando la moción, por eso votamos en contra”. O sea, como no me gustan tus maneras la ciudadanía se va a fastidiar. O tener que oir en el mismo Pleno argumentos como este: “Estamos de acuerdo con la moción de adherirse a la Red de ciudades libres de trata de mujeres, niñas y niños, pero como no se ajusta a las directrices de mi partido vamos a votar en contra”. Incluso tener que oir que el tráfico de mujeres no existe, que no es un problema y que basta que cuando se detecte un caso se haga saber a Servicios Sociales que ahí se dará la solución adecuada al mismo. ¡No entiendo nada!
Me voy a detener un poco más en la segunda moción, la de la trata de mujeres. A mi juicio, es un claro ejemplo de negación de la realidad. La realidad es aceptar que no hay dignidad en la prostitución, que los cuerpos y emociones de las mujeres les pertenecen solo a ellas y, en ningun caso, deben ser mercancías que se puedan comprar y vender. No puede existir una verdadera democracia si la mitad de la ciudadanía puede ser tratada como un objeto que se compra y se vende. La prostitución y la trata son consecuencia de situaciones de pobreza; la mujer no elige prostituirse sino subsistir, pues en los países donde ésta ha podido aumentar sus capacidades y sus posibilidades de elección y acceso a los recursos económicos ha elegido no prostituirse. Unas 700.000 personas entran al año en la UE por medio del tráfico de personas y el 90% termina en la industria del sexo.
Admiro a países como Suecia y Noruega en los que se ha abolido la prostitución eficazmente, penalizando a los hombres que explotan a las mujeres comprando servicios sexuales, considerando a las afectadas como víctimas. Estos paises asumen que la prostitución no es una cuestión de moral sino de igualdad, de derechos humanos y educan a la población para contrarrestar el histórico sesgo masculino que por tanto tiempo ha embrutecido el pensamiento acerca de la prostitución.
A dia de hoy varios municipios en España se han unido a esta corriente y en sus Plenos municipales han aprobado la moción para unirse a la Red de ciudades que combaten la trata de personas. Entre ellos se encuentran Zamora, Santa Coloma de Gramanet, Hospitalet de Llobregat, Malaga , Linares, Huelva, Benalmadena, Baracaldo, Granada…Y es una triste noticia que Palencia no haya podido ser la siguiente ciudad en la lista. Hubiese sido un orgullo para todos los hombres y mujeres de la ciudad. Nos faltó el apoyo del Partido Popular y de Ciudadanos para que se hiciera realidad. ¡No entiendo nada!
Se dice que la prostitución es el oficio mas viejo del mundo. Pero que haya existido siempre no es motivo para que siga haciéndolo en el futuro.
